Nos despertamos tempranito para afrontar una etapa algo durilla no sólo por el desnivel sino por los continuos sube-baja que sabemos nos vamos a encontrar.
Tras tomar un pequeño desayuno salimos ya en ascenso pedaleando por la C/ Margarita Nelken y La Sablera hasta las proximidades del Centro Deportivo de San Cristóbal y el Real Club de tenis de Avilés, donde bajamos por la C/ Peñamayor y luego una pista de tierra a la izquierda hacia el Arroyo de La Plata bajo la N-632, hasta coger la AS-320 en la población de La Plata y pasar de nuevo bajo la N-632 para llegar a la población de Piedras Blancas, donde giramos a la izquierda por la CT-2.
Atravesamos la población por las calles Pablo iglesias y Gijón hasta salir a la N-632A durante unos 800 metros para salirnos por la derecha en fuerte subida por trazado de hormigón rallado y luego pistas de asfalto estrechas y en mal estado, esquivando caminantes y luego seguir las flechas que nos adentran por una pista de tierra en otra subida hasta la preciosa Iglesia de Santiago del Monte, muy cuidada y rodeada de jardines, su cementerio y su roble centenario, que además está muy cerquita del Aeropuerto de Asturias.
Unos metros más adelante cruzamos la N-643 y pedaleamos por la SB-3 siempre ascendiendo hasta pasar bajo la AI-82, donde comenzamos una suave bajada y luego más pronunciada por la AS- 318, pasando por la iglesia de Ranón, un pueblo bien cuidado, con muy buena carretera que lo comunica con la Atalaya de Ranón, unica para observar el Mar Cantabrico y todo el entorno del Concejo de Soto del Barco al que permanece unido desde hace siglos.
Seguimos en serpenteante bajada por la AS-318 hasta las inmediaciones de la Playa de la Llama en la localidad de San Juan de La Arena, para girar a mano izquierda por la Avda. del Río Nalón, después llamada SB-3 para pasar por El Castillo de San Martín, una imponente edificación emplazada estratégicamente sobre una cima en la orilla este del río Nalón, donde traza un meandro antes de desembocar en el Cantábrico. Su construcción, sobre una antigua fortificación romana, se atribuye a Alfonso III y su finalidad era proteger la costa de las incursiones normandas, y a día de hoy es de propiedad privada.
Volvemos a pedalear por la SB-3 en cuesta hasta la población de Soto del Barco donde cogemos la N-632a para bajar a los cargaderos de Soto del barco junto al Puente la Portilla que une Soto del Barco con Muros de Nalón, pasando sobre la desembocadura del río Nalón donde disfrutrar de sus preciosas vistas. Se construyó en el siglo XIX y fue destruido durante la Guerra Civil. En 1938 se construyó el actual.
Tras pasar el puente comenzamos otro duro ascenso de 9 kms pasando por varias localidades hasta pasar bajo la A-8, para afrontar una rápida bajada de 3 kms hasta las proximidades del viaducto del ferrocarril y el Camping Yolimar en Artedo: De nuevo otra subida de 2 kms hasta Castañedo y otra bajada hasta la Iglesia de Santa María de Soto de Luiña, Iglesia barroca con una singular torre. Se construyó como iglesia de asilo sobre una ermita anterior en el siglo XVIII y és patrimonio de la UNESCO.
Salimos por la N-632a de nuevo en fuerte ascenso, pasando por la rotonda junto al cementerio donde ya la ascendencia es bastante menos pronunciada hasta la pequeña pero bien mantenida Capilla de Santolaya. A 1,5 kms llegamos a la iglesia de Santiago en Novellana, construida en el siglo XVIII sobre una antigua ermita. Su estilo es neoclásico y cuenta con una nave cubierta por una bóveda muy sencilla.
A partir de aquí, 16 kms de subidas y bajadas por la N-632a , pasando por las localidades de Castañeras, Santa Marina, Ballota, Ribón y Cadavéu ó Cadavedo, donde ponemos punto final en el primer bar que encontramos, a la potente etapa que nos ha dejado las piernas algo dobladas jejeje.
Qué fotazas, ganas de coger la bici este verano.